Mateo, Hamlet y la Universidad

* Por Valeria Di Croce

Postales de un país donde el ascenso social lo garantiza la educación (en tiempos donde nos gobiernan ignorantes)

 Buenos Aires 2000 | La exclusión

Caminando por Avenida Corrientes compré una oferta de los remates de libros que alguna persona necesitada vendía para comprar comida. En eso andábamos por esos tiempos de estallido.

Recuerdo los carteles de 3 libros por 5 pesos en las veredas. Se trataba de los libros de tapa dura, hojas amarillas de colecciones que sacaban los diarios.

Ya había tenido que dejar la Universidad porque en el trabajo –era de las afortunadas que contaba con uno- no me permitían ya cumplir mis obligaciones académicas.

Cuando me preguntan por la flexibilización laboral siempre cuento lo mismo: trabajaba de 8 a 18 horas, ingresaba a la Universidad Pública a las 19.

A partir de la Reforma laboral y de cifras escalofriantes de desocupación en aumento cada tarde me encontraba en la puerta con un jefe que me decía ¿a dónde vas? A clases respondía, son las 18.30

Se hacía un silencio, que solo rompían los bombos de la Avenida Alem al 600 (la oficina estaba al lado del Ministerio de Trabajo) y ya de espaldas, unos pasos más alejado murmuraba aquella frase “vos fijate, con todos los que afuera quieren trabajar y te vas a ir”.

El miedo. El discurso de la época se instalaba. La culpa era siempre del otro. Me recordaban que no era de allí, que me debería haber quedado en mi provincia en lugar de venir a Buenos Aires a estudiar y sacarles el trabajo a otros.

Por conservar mi trabajo. Dejé de estudiar.

 2003 Neuquén | De regreso

…Literatura europea 2, docente Alejandro Finzi (Dramaturgo reconocido en el mundo, con más de 30 obras, de las cuales la mayoría está traducida a otras lenguas. Da clases en la Universidad Nacional del Comahue. La excelencia académica de la educación pública).

“Hamlet es el primer sujeto moderno. Él no está loco. Elige. Sabe quiénes lo rodean. Ha escuchado desde atrás de la cortina la conspiración que se prepara y al salir de la penumbra, se hace el loco para simular. Algo que en la sociedad actual se hace permanentemente. Se simula. Se elige que decir y dónde hacerlo. La hipocresía del sujeto moderno nace en ese instante en que Hamlet se pregunta ser o no ser, esa es la cuestión…”

Esa era parte de la respuesta en un examen que implicaba analizar una obra de Shakespeare. Finzi me felicitó por el análisis. Luego me sugirió leer a Georg Buchner. Lo hice. Me enamoré del Woyzzek (una obra del año 1836)  y del instante en que el personaje principal, un soldado que regresa de la guerra desgarrado como sujeto y ya abandonado por su compañera que lo traiciona habla con el Capitán a quien afeita (uno de los tantos trabajos que tenía para mantenerse) y ante el reto del superior por no haber bautizado a su hijo e impedir entonces que este acceda al cielo responde: “Todo muy lindo. Pero yo soy pobre. Nosotros los pobres trabajamos aun en el cielo, si me tocara ir seguro debería hacer tronar”.

2017 | Un instante con Mateo

Mateo nació en 2013. Cuatro años después  tenía este diálogo con su mamá.

 – Mamá ¿los nenes que nacen pobres siempre van a ser pobres?
– No. La pobreza se puede revertir. Si los papás de ese nene consiguen un trabajo y mandan a su hijo a la escuela, ese nene puede estudiar. Y así crecer y puede llegar a la Universidad.

¿Y si los papás no tienen trabajo?
– Bueno ahí es importante lo que hace el Estado. Con la Asignación Universal por Hijo los nenes y las nenas van a la escuela y se los cuida porque se los vacuna y se les hace controles para prevenir que no se enfermen.

– ¿Y los papás que hacen? ¿Se les da trabajo?
Se trata de darles trabajo, se generan oportunidades… Incluso si los papás no habían terminado la escuela había programas para que lo hagan como el FINES que era para que los adultos que no estudiaron o dejaron inconclusos sus estudios, los terminen

¿Y cuando terminan la escuela los nenes que hacen?
Después, cuando terminan la escuela pueden acceder a becas o al ROGRESAR para comprarse los libros y pagarse el transporte o al menos ayudar a hacerlo y seguir estudiando…. Y de esa manera, estudiando y aprendiendo cada día podes conseguir trabajo y mejorar tu vida…

– ¿Y por qué hay cada vez más pobres?
Porque el Estado no está cumpliendo su rol como hacía antes.

¿Ahora hay más pobres no?
Si

Pero si hay más pobres, Macri va a perder porque cuando tengan que votar la van a votar a Cristina que es la que hace que los nenes que nacen pobres no lo sean más porque les da trabajo a los papás.


2018 | El pasado y el futuro

Una mujer que estudió en la UCA, a quien la educación privada le permitió tener un título está en la sala de conferencias del Sheraton.

 “Todos los que estamos aquí sabemos que los pobres no van a la Universidad”, dice frente a una concurrencia masculina.

Una madre. Una mujer. Una persona que ejerce la política. Un instante en donde la sensibilidad de los tres roles ha desaparecido.

No hay en ese comentario un mínimo rasgo de la humanidad indispensable para ejercer la función pública.

¿Qué le habría respondido Vidal a Mateo?
Si Mateo, los niños que nacen pobres, siempre serán pobres.

Nada hay en esas palabras de quien –como Hamlet- ha medido las palabras que el entorno requiere y dijo lo que esperaban de ella. María Eugenia Vidal eligió el camino del sujeto moderno hipócrita.

Debería saber Vidal –que no nació empresaria aunque se rodee de esa casta- que los documentos que portan esos pibes a los que condena con su afirmación, no dicen más que el sexo, la fecha y el lugar de nacimiento.

Lo que suceda a partir de que ese niño comience a mirar a los ojos al mundo dependerá de su familia, de su entorno y del Estado. Las oportunidades si no existen no se pueden aprovechar. Le corresponde a la política asumir el rol de brindarlas. Nos corresponde a todos hacer que la política sea transformadora de realidades.

El ascenso social es posible ¿o piensa Vidal como pensaba Lonardi  ¿Cree la gobernadora que la Revolución de la “alegría” llegó a “este bendito país para que el hijo del barrendero muera barrendero”?

Por suerte, hay millones de pibes como Mateo que saben que Vidal miente. Nacieron en los tiempos donde ser pobres no era una condición inquebrantable.

Por suerte hay millones de pibes y pibas que saben que hay mujeres como Cristina que no solo hablan de la Patria, la construyen y le abren la puerta a los millones que Vidal y sus amigos dejaron afuera a lo largo de la historia…